El día de hoy quiero ver contigo un tema muy sencillo pero trascendental para nuestra vida, el tema es la sinceridad con nosotros mismos.
Por increíble que parezca, nos mentimos más de lo que creemos, consciente o inconscientemente de manera constante nos estamos mintiendo y eso obviamente se traslada o se refleja en una relación en la que nos une más la necesidad que el amor. Te explico por qué:
Cuando estamos en este tipo de relaciones, logramos sincerarnos en momentos de intimidad y de soledad y aceptamos que nuestra pareja no termina por satisfacernos, no termina por llenarnos el algún sentido, es decir, nos damos cuenta que no estamos enamorados o que las cosas ya no funcionan ¿y cómo lo sabemos? Por cómo se siente; sabemos que algo es real por cómo nos sentimos respecto de dicha situación.
Y cuando no estamos enamorados, puede que sintamos cierta admiración, afinidad o cierto cariño por esa persona, pero no un enamoramiento genuino. Y es justamente en ese momento cuando nos empezamos a mentir, porque buscamos razonamientos, argumentos que nos convenzan y respalden nuestra decisión de permanecer en relaciones de este tipo.
“Ok, no estoy del todo enamorado (a) pero es que la verdad es muy buen partido, es una excelente persona, es una persona centrada, tiene un buen empleo o negocio”. Pero si seguimos pensando y actuando de esta forma, lo único que nos va a unir a esa relación van a ser razones en lugar de fuertes emociones, ¿Por qué? Porque no estamos siendo sinceros con lo que sentimos, sólo estamos actuando alineados con lo que pensamos, pero no así con lo que nuestras emociones nos dictan. De seguir así, nos estaremos condenando a una profunda infelicidad o insatisfacción en un aspecto tan importante como lo es la vida en pareja.
Por eso es tan importante sincerarnos con nosotros, pero no solamente eso. Sino también tomar acción genuina, acción alineada con eso que sentimos paras poder soltar las cosas y personas que ya no estén alineadas con nuestra vida y así poder acceder y lograr nuestros más profundos anhelos, deseos e intereses.
Y esto último, no solamente aplica a relaciones de pareja, sino también a cualquier actividad, por ejemplo, un deporte que ya no disfrutes practicarlo pero que lo hacías porque tus papás te obligaban; o un trabajo que no te apasiona, que igual puede ser cómodo, tranquilo pero sobre todo tolerable, pero que a fin de cuentas no te apasione, es decir, no te llena.
Sin embargo, ser sinceros con nosotros no es tan fácil como parece o como se dice; como dice la canción “es más cómodo engañarse”, es más cómodo fingir estar bien y fingir felicidad. Por eso te quiero preguntar, en caso que te hayas identificado con lo que hemos estado viendo, “de seguir así, ¿cómo será tu vida en 5 años, o en un futuro?”
Por último, como reflexión, te dejo la frase de Andrés Calamaro que dice “La honestidad no debe ser una sólo una virtud, sino debe ser una obligación para con nosotros mismos”.
Si te gustó el video te invito a que lo compartas en tus redes social y obvio te descargues mi e-book “Amor vs Necesidad: 11 preguntas poderosas para evaluar tu relación de pareja” el cual si eres sumamente honesto contigo te ayudará a distinguir entre el amor y necesidad como unión de tu relación de pareja.
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Gracias por leer hasta aquí, nos vemos la próxima! 🙂