Acabo de colgar una llamada que tuve con un amigo que me habló para contarme sus “penas amorosas” y en esa llamada me hizo un comentario que me hizo reflexionar y quiero compartir ese pensamiento contigo.
En la llamada, mi amigo me dice que “es que en tus videos lo dices muy fácil, y está muuuy difícil”. Y sí, en los videos suena muy fácil. Es muy fácil venir y hablarte o reflexionar contigo sobre las emociones, el dolor que surge en una ruptura, o el dolor que sentimos cuando venos a nuestro ex con alguien más. Sí, suena muy fácil pero definitivamente no lo es. Detrás de esas palabras hay vivencias complicadas.
Y le decía a mi amigo: “vale la pena”. Definitivamente no es fácil, pero vale la pena vivir cada instante, cada momento de dolor. Y evitar ocultarlo o disfrazar ese dolor con otra emoción que no sentimos realmente. Vale la pena cada momento de soledad.
Vale la pena cada momento en el que sufrías o sufres por ver, accidentalmente, una foto de esa persona con la que viviste momentos lindos. Digo, tampoco se trata de mutilarnos viendo las fotos de nuestro ex con alguien más, no se trata de eso. Pero si te lo llegas a encontrar y te sientes triste, ¡vívelo!
No huyas de ese sufrimiento, de ese dolor y evita disfrazarlo de felicidad o iniciar una nueva relación, o regresar con esa persona. No temas a la soledad, no temas al “qué dirán”. No temas experimentar dolor, también de eso está hecha la vida.
¿Y por qué vale la pena? Porque es en los momentos dolorosos es donde descubrimos nuestros regalos más maravillosos. Lo ideal sería que después de una ruptura amorosa, descubramos el regalo que se esconde detrás de ese dolor y crezcamos como persona, que si bien no es diferente, sí creció en su consciencia.
En lo personal, la verdad que agradezco infinitamente los momentos dolorosos que he vivido, porque es justamente gracias a esos momentos, es que hoy puedo compartir lo poco o mucho que sé en el tema. Y eso, le da sentido a mí existir. Me llena de plenitud.
Como conclusión, sólo quiero dejarte esta invitación: Si estás viviendo un momento doloroso, un duelo o que te cueste ver a tu ex con otra persona, te invito a que no te vayas por el camino fácil, ¿es más difícil vivir ese dolor? Sí, sí lo es. Pero como lo he repetido a lo largo de este post, vale la pena cada segundo, cada instante de esa vivencia. Porque ese dolor nos hará crecer como personas.
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